Disfrutas de tu soltería, de tu tiempo contigo misma, pero hay momentos en los que la soledad te aprieta el alma y llega a lastimarte. Es ahí cuando comienzan tus cuestionamientos y miedos respecto al amor. Si bien tú sabes que eres valiosa e increíble no logras entender cuál es el motivo por el que tus relaciones amorosas quedan a medio camino.
Hay algunas razones que probablemente no has tomado en cuenta:
1. No necesitas de una pareja
Suena duro, pero ¿realmente crees que necesitas de otra persona para validar tu existencia? Eres mucho más que la novia de alguien y lo sabes, quizás por eso no inviertes todo tu tiempo en encontrar a tu media naranja, sabes que naciste "completa".
2. Estás demasiado ocupada
Los proyectos de tu vida te tienen concentrada en algo que nada tiene que ver con la pareja. Quizás se trate de viajes por el mundo, emprendimientos personales, o las cenas con tu perro un viernes a la noche. A veces, la comodidad que sientes en la soltería es lo que te mantiene sola por un tiempo y está bien.
3. Tu profesión es una prioridad
Estamos en el siglo XXI, es obvio que algo así puede pasar. Tu carrera es tu pasión y la satisfacción que le aporta a tu vida es inmensa, por eso muchos de tus esfuerzos están concentrados allí. Debes estar orgullosa de que así sea.
4. Tienes amigos grandiosos
¿Creíste que esto no era una buena razón? El tiempo que inviertes en tus amigos es tiempo de calidad y bajo ningún concepto quieres que disminuya. Y a decir verdad, cuando comienzas una relación es obvio que ese tiempo disminuirá considerablemente, así que por ahora les dices no a los chicos.
5. El amor no es lo que solía ser
Las desilusiones amorosas te han llevado al desencantamiento. Sabes lo que la gente es capaz de hacer en nombre del amor, pero también conoces la faceta más oscura y dolorosa, por lo que volver a confiar en alguien te resulta engorroso.
6. Eres una mujer fuerte
Es una cualidad que a muchos chicos les asusta porque no saben cómo tratar a alguien como tú y quiere decir que eres mucho más valiosa de lo que crees.
7. Necesitas un tiempo para ti
Antes de compartir tu vida con una persona necesitas conocer más acerca de ti misma y es lógico. Descubrir tus habilidades y tus miedos más grandes es fundamental para poder abrirte por completo a otra persona.
8. No estás lista
Este punto no necesita demasiada explicación, internamente lo sabes, así que deja de cuestionarte.
Fuente: Vix.com
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